Business Intelligence

Muchas personas piensan que las herramientas de Business Intelligence solo son de utilidad para las grandes empresas o para los CEOs de las mismas. Al final, son ellos los que tienen que tomar las decisiones más importantes. Sin embargo, la Inteligencia de Negocio puede aplicarse a cualquier tipo de empresas, sin importar su tamaño o servicio, esto nos puede facilitar tableros de control e informes específicos sobre todas y cada una de las áreas de nuestra organización. Desde contabilidad hasta logística, pasando por marketing y ventas.
De esta forma, la información puede ser compartida en tiempo real entre los diferentes miembros de la compañía, facilitando la toma de decisiones por parte de los responsables de cada área.

Excel vs Business Intelligence

Pese a las ventajas que aporta la Inteligencia de Negocio, la gran mayoría de las empresas continúa confiando en sus sistemas tradicionales. Así, solo una de cada cuatro pymes cuenta con una solución de BI, mientras que un 54% sigue utilizando Microsoft Excel de forma exclusiva para la elaboración de sus informes financieros. Sin embargo, las hojas de cálculo no siempre ayudan a tomar decisiones operativas. Es decir, podemos introducir gran cantidad de datos, pero a la hora de extraer partido a esa información, nos surge el problema o los problemas:

  • Necesita mucho tiempo y muchos recursos
  • No se actualiza en tiempo real
  • Podemos cometer errores al introducir datos manuales
  • Poco atractivo visualmente
  • Beneficios del Business Intelligence

    Debido a la introducción de ERPs en las empresas, los directivos y responsables de departamentos cada vez cuentan con más información para analizar: contabilidad, gestión de clientes y oportunidades, datos de proveedores… Como decíamos, las herramientas de Business Intelligence son una solución perfecta tanto para pymes como para grandes empresas que quieran tomar decisiones acertadas basadas en datos e información en tiempo real. ¿Qué es lo que nos ofrece la Inteligencia de Negocio?

    1. Datos correctos en el momento preciso

    El Business Intelligence permite tener todos los datos de la empresa estructurados y sobre todo centralizados. Como consecuencia, se incrementa la agilidad a la hora de tomar decisiones y se amplía la visión del negocio. Se evita así la toma de decisiones basadas en suposiciones, intuiciones o especulaciones. Con el BI las decisiones se toman en base a datos concretos y reales.

    2. Informes personalizados

    Permite adaptar los informes de Inteligencia de Negocio a las necesidades de cada uno de los departamentos de las empresas. Con ello, los responsables de las diferentes áreas tendrán información actualizada en tiempo real sobre aquellos datos que realmente les interesa.

    3. Cuadros de mando atractivos

    Crea tus propios paneles de control, con tus indicadores clave y tus filtros. Hazlo, además, en cuestión de minutos, cómo quieras y con los datos que quieras. Una de las grandes ventajas del Business Intelligence es que la mayoría de las herramientas proporcionan cuadros de mando muy visuales y muy fáciles de interpretar.

    4. Colaboración

    Los informes personalizados facilitan la comunicación, pudiendo compartir información con el resto de la empresa. Cada departamento cuenta con los datos que necesita y a la vez, el equipo directivo, puede tener acceso a todos ellos.

    5. Ahorro de tiempo

    La ineficiencia es uno de los grandes problemas de no disponer de una herramienta de Inteligencia de Negocio. De hecho, los usuarios pueden perder mucho tiempo buscando información y, en el caso de encontrarla, esta puede estar desactualizada.